El pasado Miércoles como todos sabemos se llevó a cabo el partido México vs Trinidad y Tobago.
La historia ya todos la conocemos, una Selección Mexicana repleta de talento pero que carece de (aquí es donde entró en jaque) chispa, carácter, presencia, contundencia, trabajo, ganas...
No encuentro la palabra adecuada con la cual describir mi sensación como espectador. Es por eso que me decidí a escribir estas lineas.
SELECCIONADOS:
No soy una persona mayor que ustedes, puede que ninguno de ustedes vaya a leer esto.
Yo crecí con un padre que me heredó el gusto por el hermoso deporte que es el futbol (como mas de la mitad de los niños de México). Crecí viendo a los Francisco Palencia, a los Luis Hernández, a los Rafa Márquez, a los Cuauhtémoc Blanco, a los Oscar Pérez, a los Oswaldo Sánchez, a los García Aspe, a los Jorge Campos, a los Gerardo Torrado, a los Pavel Pardo, a los Jared Borgetti. Un cantidad de jugadores impresionantes, que estoy seguro ustedes también tuvieron la oportunidad de ver e inclusive serán ídolos de la infancia.
Soy lector frecuente del periódico, en este caso RECORD. No voy a cuestionar si la reunión se realizó o no y todo ese alboroto, solo ustedes saben lo que en verdad ocurrió. Me decepcionó mucho el resultado en contra de Trinidad y Tobago (como a casi todos los aficionados del futbol), como dije anteriormente, hace años que no veía a una Selección Nacional teniendo resultados de esta categoría. Duele en verdad el orgullo como aficionado, y es que no acabo de comprender que esta ocurriendo.
Ustedes, Seleccionados Nacionales, ídolos de la mayoría de los jóvenes mexicanos no pueden darse el lujo de enfrascarse en pleitos por redes sociales por cuestiones tan triviales. Claro, es muy fácil decirlo desde este lado, no tengo idea de lo que se siente ser "famoso".
Son la generación más prometedora que he visto, a muchos de ustedes los vi por televisión en el 2005 (Vela, Dos Santos y Moreno), los vi ganar Copa Oro, ganar partidos contra equipos complicados, de manera categórica.
¿Que está pasando?, ¿Que cambio?, ¿Porque parece que juegan sin alegría ni entusiasmo?. No es falta de talento, eso me queda mas que claro. No se si creer todo lo que dice la prensa, no lo quiero hacer, ¡No dejen que lo haga!.
Vuelvan a brillar, disfruten su juego, si no se sienten a gusto con el sistema táctico pidan un cambio. ¡Tengan vergüenza profesional!.
Tienen el talento, los argumentos y sobre todo la capacidad. No dejen que el dinero los llame, eso no da felicidad (aunque lo parezca). Niños y jóvenes de todas las edades juegan este deporte imitándolos (lo digo por que yo lo hice, y lo vi recientemente, SE SIGUE HACIENDO), no finjan faltas, no reclamen sin motivo, fijen su meta en ganar el partido de la mejor manera posible.
Puede que no conozcan la situación del país, puesto que la mayoría viven en el extranjero. Pero los ciudadanos comunes y corrientes tenemos que sobrellevar una vida complicada. No vivimos, SOBREVIVIMOS. No soy como muchos de los detractores de este deporte, para mi y para muchos mexicanos, algo tan insignificante como una victoria en un partido de futbol de nuestra Selección Nacional puede significar una alegría en medio de un mal momento.
Respeten su camiseta, su carrera y a su afición. No se metan en escándalos innecesarios.
Para mi siguen siendo la generación más prometedora de la historia del futbol mexicano, no dejen que se quede en eso, una simple promesa.
Esperando lea alguno de ustedes esto y no solo pase como la crítica de un aficionado mas. ¡A ganar el domingo!
Atentamente.
Un aficionado más que desea lo mejor para su representativo nacional.
RICARDO GARCÍA G.
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